ISSN-01862 391

e-ISSN-2395-8235

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Órgano Oficial del Instituto Nacional de Pediatría

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Periodicidad: bimestral
Editor: Felipe Aguilar Ituarte
Abreviatura: Acta Pediatr Méx
ISSN: 0186-2391
e-ISSN: 2395-8235

En memoria: Dr. Lázaro Benavides Vázquez

In memory: Dr. Lázaro Benavides Vázquez.

Acta Pediatr Mex. 2016 may;37(3):135-138.

M en C. Julio César Ballesteros del Olmo
Expresidente Academia Mexicana de Pediatría

“Don Lázaro, nuestro amigo, al que
cariñosamente al cumplir 100 años, la familia le regaló un arbolito bonsái “SEQUOIA”, como un homenaje a su grandeza,
resistencia y longevidad.

A sus 102 años de vida, unos días después de cumplirlos, al hacerle referencia a la grandeza de cumplir y vivir 102, nos corrigió y nos dijo: “No, 102 ya no, está corriendo el 103”.

“Un orgullo ser su amigo”

 

Nace el 6 de marzo de 1914 en la Ciudad de Piedras Negras, Coahuila. Estudió High School en Eagle Pass, Texas, donde obtiene su grado. En 1930, obtiene el primer lugar para el Estado de Texas en el certamen anual del Foro Nacional de Estudiantes Americanos, correspondiendo esto, al 6º lugar en toda la Unión Americana.

A principio de los años 30’s, llega a la Ciudad de México a estudiar el bachillerato en el Antiguo Colegio de San Ildefonso por dos años, en donde la relación con médicos amigos de la familia le da la iniciativa de estudiar medicina enrolándose en la Escuela Médico Militar en la Generación 1935–1940; en ésta, conoce algunos maestros inolvidables como Fernando Ocaranza quien también fue rector de la UNAM; Gustavo Baz Prada, Director de la Facultad Nacional de Medicina, de la Escuela Médico Militar y el vigésimo tercer Rector de la UNAM y a Jesús Lozoya Solís, entre otros. Recibe la cátedra y la inspiración de Don Federico Gómez, quedando prendado de la pediatría y esto lo marca para toda la vida.

En 1941 se gradúa con el grado de Mayor, ejerciendo tareas encomendadas por algunos años. Se da de baja como médico militar con grado de teniente coronel en 1956. En este trayecto, estudia enfermedades infecciosas en el Municipal Contagious Disease Hospital y posteriormente en el Children’s Memorial Hospital, en la Ciudad de Chicago, y en la Universidad de Tulane, Nueva Orleans, donde cursa una maestría en salud pública y en administración médica, obteniendo la “Medalla Delta-Omega”, otorgada al mejor estudiante de su generación. Estos estudios lo proyectan como un formador de instituciones asistenciales nacionales de primer orden, donde se da asistencia, enseñanza e investigación hasta los tiempos que vivimos.

Al regreso de los Estados Unidos, se incorpora al Hospital Infantil de México en el que forma parte de la primera generación de internos (médicos residentes) desde 1943. A partir de esa fecha, inicia una meritoria carrera escalafonaria que incluye las posiciones de subresidente, residente, jefe de residentes, Titular del Servicio de Infectología y de la Oficina de Ediciones Médicas. En 1953, por invitación de Federico Gómez, se integra como subdirector del hospital, permaneciendo en este honroso cargo hasta el año de 1970.

En aquella época, tenía una consulta extraordinaria. Muy rica, y tenía muchísima clientela. Una vez le dijo don Federico Gómez: “Quiero que se venga de subdirector del Hospital Infantil de México, pero si usted lo acepta, piénselo un tiempo, porque tendrá que dejar la consulta. Usted decide, si es subdirector de tiempo completo o se retira a su clientela.” Dijo entonces el Dr. Benavides: “Pues me gustó más la situación de funcionario que de pediatra de consultorio. Y me dediqué a la subdirección”.

La labor de don Lázaro en esa inolvidable etapa del Hospital fue muy productiva; entre otras, se destaca su labor al frente del Boletín del Hospital Infantil de México, en el cual se plasma todo el acervo médico de investigación y la difusión de la institución a toda Latinoamérica. Asimismo, la creación de las áreas de Medicina Preventiva y de Rehabilitación Integral, que elevaron la labor asistencial del hospital a niveles insospechados. En esa época, se reconoce una de las etapas de oro del Hospital Infantil de México, cuando se dan excepcionales acciones en el campo asistencial, docencia e investigación, y luego en la formación de subespecialistas graduados en el extranjero, que regresaban y se hacían notables eminencias médicas, que crearon importantes especialidades pediátricas, constituyéndose en uno de los mejores hospitales pediátricos de América Latina.

En 1968 preside, organiza y coordina el primer Congreso Internacional de Pediatría con sede en la Ciudad de México, con la asistencia de 7,000 personas, evento que le da proyección internacional a la pediatría mexicana.

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