ISSN-01862 391

e-ISSN-2395-8235

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Órgano Oficial del Instituto Nacional de Pediatría

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Periodicidad: bimestral
Editor: Felipe Aguilar Ituarte
Abreviatura: Acta Pediatr Méx
ISSN: 0186-2391
e-ISSN: 2395-8235

Una mirada a la nueva Guía de Prevención de Infecciones en el área de anestesia en el quirófano

A look at the new expert guidance for infection prevention in the anesthesia work area

Acta Pediatr Mex. 2019 julio-agosto;40(4):181-190.

Hilda Guadalupe Hernández-Orozco,1 Gonzalo Bearman2

1 Departamento de Infectología
Comité de Infecciones Asociadas con la Atención de la Salud
Instituto Nacional de Pediatría
2 Hospital Epidemiologist
Virginia Commonwealth University

Correspondence
Hilda Guadalupe Hernández-Orozco
wuzhi1916@gmail.com
Gonzalo Bearman
gonzalo.bearman@vcuhealth.org

Este artículo debe citarse como
Hernández Orozco HG, Bearman Gonzálo. Una mirada a la nueva Guía de Prevención de Infecciones en el área de anestesia en el quirófano. Acta Pediatr Méx 2019;40(4):181-190.

INTRODUCCIÓN

 

Se estima que en Estados Unidos cada año suceden 157,000 infecciones del sitio quirúrgico asociadas con la atención de la salud,1 con 8205 muertes vinculadas con ellas. También se atribuye que 11% de las muertes en unidades de cuidados intensivos se relacionan con infecciones del sitio quirúrgico.2

Las infecciones del sitio quirúrgico aumentan la estancia hospitalaria de pacientes 11 días en promedio3 y ocasionan 20% de los reingresos del paciente no planeados.4 El costo de atención de estas infecciones alcanza 3200 millones de dólares anuales.3 En los últimos 5 años, en el Instituto Nacional de Pediatría las infecciones de todos los servicios quirúrgicos reportan tasas mínimas de 5.6 (en 2016) a máxima 8.4 (en 2018) por 1000 días paciente.5

Lo anterior denota la importancia del problema de las infecciones del sitio quirúrgico y la necesidad de la búsqueda de estrategias de prevención; secundario a ello se ha explorado la participación del proceso de anestesia como un factor contribuyente para la generación de estas infecciones.

 

El problema

 

La evidencia demuestra que las cinco superficies más contaminadas en el quirófano son el teclado de la enfermera, el teclado y ratón del anestesiólogo, el cajón del carro de anestesia y la mesa de operaciones. El grado de contaminación observado en el área de anestesia indica que aun cuando los anestesiólogos no tienen contacto directo con el sitio quirúrgico, su potencial contribución a la trasmisión de infecciones durante los procedimientos es alto; por lo que se desarrollan un conjunto de consideraciones para la prevención de infecciones en esta área: manipulación y limpieza de equipos, seguir una técnica aséptica, administración segura de medicamentos, y la medida más simple y efectiva: practicar la adecuada higiene de manos. Se reporta que de ésta, los anestesiólogos sólo cumplen 20% de la higiene de manos que deberían realizar y usan guantes cuando está indicado en 10% de los casos. También llevan a cabo acciones de riesgo : manipular equipo multiusos, medicamentos multidosis e inconsistencia en la asepsia del punto de inyección de fármacos en el equipo. Otro factor de riesgo durante la cirugía es que en algunas ocasiones el anestesiólogo manipula la posición del paciente a petición del cirujano tocando superficies fuera de su área de anestesia.6

La problemática de prevención en el trabajo diario del anestesiólogo se documenta al determinar que para llevar a cabo el proceso de anestesia del paciente debería lavarse las manos al menos 54 veces por hora y esto influye en la no ejecución de esta medida. Se ha observado un cumplimiento de sólo 17% de apego a la higiene de manos por parte del anestesiólogo. Algunos investigadores mencionan que lo anterior es imposible, por lo menos en los 5 momentos durante el proceso de inducción anestésica. Otro factor contribuyente es el volumen de trabajo acelerado, que en ocasiones implica la atención de un nuevo procedimiento anestésico en los siguientes 10 a 15 minutos, lo que es un desafío para la práctica de la higiene de manos como para llevar a cabo la limpieza del equipo de anestesia, del carro de anestesia, y del ambiente alrededor de éste; sin embargo, aun así deben efectuarse estas medidas de prevención para evitar la trasmisión cruzada de microorganismos y la generación de riesgos de infección asociada con la atención de la salud.7

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